La compatibilidad entre el modelo de gestión cooperativa y los sistemas de calidad iso 9000
Calidad y excelencia, ¿es lo mismo?
Muchas veces se suelen emplear los términos “calidad” y “excelencia” de forma indistinta, dando el mismo sentido a uno que a otro. Si acudimos a las definiciones, Calidad se dice que es la “Propiedad o conjunto de propiedades inherentes a algo, que permiten juzgar su valor.” Respecto de la Excelencia, podría considerarse un término más filosófico, algo así como “de superior calidad o bondad que lo hace digno de singular aprecio y estimación”. Como se desprende de lo anterior, la calidad es algo más tangible que la excelencia. La excelencia es un término que indica una cualidad, más filosófico.
Las organizaciones han empleado estos términos para distinguirse entre ellas, para mejorar su imagen y tratar de vender más y mejores productos y servicios día a día. Normalmente, cuando se dice que una empresa es excelente, es porque tiene unos estándares de calidad que los cumple y que son elevados.
En la actualidad, las dos grandes metodologías que se aplican en relación con la calidad y la excelencia son la norma ISO 9001 de Sistemas de Gestión de Calidad y los Modelos de Excelencia; algunos pueden ser el Premio Nacional de Calidad, Modelo EFQM, el Modelo de Gestión de la Corporación Mondragón, y el MGC codiseñado por la Fundación Nodos.
Modelos de Excelencia y Normas ISO
La familia de las normas ISO 9000 establecen los requisitos (normas, procesos y procedimientos) que los sistemas de gestión deben cumplir para asegurar la calidad que las organizaciones quieren y han definido para sus productos y servicios. Dentro de esta familia, la más reconocida es la ISO 9001, y permite que terceras partes certifiquen que la organización cumple con lo requerido por la norma para demostrar su compromiso con los mínimos que ella misma se ha marcado.
Por su parte, los Modelos de Excelencia son una herramienta de evaluación y mejora de los sistemas, representan un modelo de calidad total pero que no se aplican directamente sobre el sistema de gestión de calidad de la empresa, sino que se basa en herramientas para verificar como interactúan las distintas partes de la organización, sus personas y la dirección, sirviendo a las organizaciones como una herramienta de gestión y verificación de cómo se están llevando a cabo las actividades, procesos y obteniendo los productos y servicios.
El Modelo de Gestión Cooperativa
El Modelo de Gestión Cooperativa (o MGC) es un modelo que permite realizar un análisis de la organización con el propósito de evidenciar puntos fuertes y áreas de mejora. Su propósito es incrementar la competitividad y sustentabilidad de las cooperativas, mejorando la calidad de gestión y sus resultados. Fue codiseñado por Fundación Nodos junto a un grupo de cooperativas y propone un marco de referencia, para el fortalecimiento de la gestión.
Con la primera instancia de autoevaluación se verifican cómo actúan las distintas áreas de la cooperativa, con el objetivo de obtener una puntuación que ubica a la organización dentro de una escala de excelencia, en la cual se puede ascender o descender a lo largo del tiempo en función de las mejoras que se vayan implementando. Con esta Autoevaluación se obtendrán, además de los resultados de la calificación, los puntos fuertes y las áreas de mejora.
Luego de ese primer paso, el Modelo de Gestión Cooperativa permite continuar con el camino de mejora, incorporando los desafíos emergentes de la Autoevaluación en su Plan Estratégico, con el objetivo de consolidar y capitalizar las buenas prácticas y fortalezas, posibilitando la adopción de un sistema de gestión de Calidad ISO 9001 como soporte para la gestión y la mejora continua.
Las similitudes entre el MGC y las ISO 9001
Aunque el modelo de las normas ISO 9000 y el Modelo MGC se pueden presentar como dos modelos diferentes para adoptar una iniciativa de calidad en la gestión, existen similitudes entre ellos. En primer lugar, ambos están basados en principios comunes, tales como la orientación al cliente (asociados) y sus distintos grupos de interés, la importancia de analizar el contexto para desarrollar la estrategia y un pensamiento basado en identificar riesgos y oportunidades, el liderazgo, el enfoque en las personas y la mejora continua. En segundo lugar, ambos modelos promueven la mejora continua en la gestión gracias a la identificación de fortalezas y áreas de mejora, y están basados en el ciclo de mejora continua (Nota: el concepto del ciclo de mejora continua que establece la norma ISO 9001 está basado en el Ciclo PDCA: Planear – Hacer – Verificar – Actuar). En tercer lugar, ambos posibilitan el reconocimiento externo; para el caso de la norma ISO 9001 permite conseguir dicho reconocimiento con la certificación de un sistema de gestión de la calidad, y el Modelo MGC con la presentación de los resultados de la autoevaluación y una comparación de la cooperativa contra los mejores actores Sin embargo, también poseen ciertas diferencias, especialmente con respecto a su alcance. La norma ISO 9001 proporciona requisitos para el sistema de gestión de calidad, mientras que el Modelo MGC es un modelo que proporciona una metodología de autoevaluación aplicable a todas las actividades y partes de la organización para lograr una transformación del sistema de gestión, donde la mejora, la innovación y la sostenibilidad logran mayor protagonismo, teniendo un alcance más amplio que el de la norma ISO 9001.
El Modelo MGC permite la comparación entre organizaciones, gracias a los diferentes niveles de desempeño que es posible alcanzar y que invita a compartir las mejoras prácticas. En cambio, la norma ISO 9001 solo permite obtener un certificado, pero no una comparación respecto al nivel alcanzado por cada organización. En la misma línea, a diferencia de la norma ISO 9001, el Modelo MGC permite valorar la evolución del grado de madurez de la organización gracias a la posible variación en la puntuación obtenida en diferentes procesos de evaluación a lo largo del tiempo. Una organización que posea un certificado de acuerdo con la norma ISO 9001 habrá sido capaz de establecer un sistema de gestión orientado a la consecución de objetivos relativos a sus clientes, mientras que el Modelo MGC invita a ampliar la perspectiva hacia los demás grupos de interés, enfocarse en lograr resultados sustentables en todos los ámbitos de la gestión. Según Damian Librante, responsable del área de Sinergia de Fundación Nodos, es importante destacar que ambos sistemas son compatibles entre sí. El Modelo de Gestión puede resultar un muy buen primer paso para una cooperativa que esté pensando en implementar a futuro una certificación en alguno de sus procesos, ya que la metodología de evaluación en muchos aspectos es similar, y muy ordenadora al momento de presentar y analizar la documentación requerida. La herramienta desarrollada por Fundación Nodos, otorga una visión ampliada con respecto a la importancia de analizar la evolución de aquellos indicadores que van más allá de los económicos y financieros, y la instancia de Autoevaluación es una herramienta que permite la mejora continua, pensada a la medida de las cooperativas del ecosistema.